La fecha es utilizada para concientizar sobre la importancia de prevenir esta enfermedad y evitar, también, que desmejore la calidad de vida de quienes la padecen.
La Hipertensión Arterial es un factor de riesgo de enfermedades cardiovasculares e incluso, en ocasiones, un riesgo de vida.
Puede provocar infartos de miocardio y accidentes cerebrovasculares. La Organización Mundial de la Salud estima que por su incidencia, mueren anualmente nueve 9 millones de personas.
Sólo con la disminución del consumo de sal, se podrían evitar en la Argentina unas 6 mil muertes y 60 mil eventos cardiovasculares por año.
Desde el Departamento de Enfermedades Crónicas No Transmisibles del Ministerio de Salud, se informó que la Hipertensión afecta a un tercio de la población rionegrina.
Por ello, y durante los días previos y posteriores a esta fecha, personal hospitalario de toda la Provincia realizará controles de presión arterial y difundirá información a la comunidad en puestos instalados en los lugares de mayor concentración de público de cada localidad.
En Viedma, el Ministerio de Salud acompañará la actividad organizada desde el Hospital Zatti con la difusión pública de recomendaciones para una alimentación saludable y una vida sin sedentarismo.
Recomendaciones
Si bien no es curable, la HTA puede controlarse. Su tratamiento requiere adecuar la alimentación a las necesidades individuales, con control de sodio y una serie de recomendaciones que orienten a la persona hacia un estilo de vida más saludable.
El consumo actual de sal se encuentra por encima de las necesidades reales. Este exceso se relaciona con la retención de líquidos en los tejidos del cuerpo y por tanto, con el incremento de los valores de tensión.
Cuanto menos sodio contenga la dieta, más fácil será eliminar ese exceso por la orina y así contribuir a normalizar los niveles de tensión arterial.
La Estimación del consumo de sal en Argentina es de 12 a 13 gramos por día por habitante. La Organización Mundial de la Salud recomienda consumir no más de 5 gramos, por lo que el fomento de la reducción de sal en las comidas es una de las estrategias más costoefectivas para prevenir las enfermedades cardiacas, el Accidente Cerebro Vascular y la enfermedad renal crónica, que representan una importante carga sanitaria.
En este sentido, Salud trabaja en el marco de la iniciativa nacional “Menos Sal, Más Vida”, como parte de un plan integral de prevención y control de enfermedades crónicas no transmisibles. El mismo, incluye acuerdos con los elaboradores de panificados, con el fin de reducir el contenido de sodio de sus productos.
También existe evidencia suficiente para afirmar que la práctica regular de actividad física reduce la hipertensión arterial leves y moderados, convirtiéndose en una buena medida para el control de la presión arterial