El lema de este año propuesto por la ONU, es “no dejar a nadie atrás”.
En el caso particular de Río Negro, actualmente tiene una de las mejores coberturas alcanzando un 97,76% de agua potable y un 83% de cloacas. Además, en los últimos siete años el porcentaje de usuarios se incrementó un 14%, y el servicio de agua potable a finales de 2018 llegó a más de 215.565 familias.
Más allá de eso, la Provincia hoy trabaja en un proyecto clave: sanear los ríos a través de una política hídrica de avanzada que plantea el uso sustentable de las aguas de cloacas y como destino, el reúso en riego productivo. Así lo explicó el superintendente del DPA, Fernando Curetti: “Tenemos siete planes directores de desagües cloacales, dos a punto de comenzar y la ampliación de la planta de Cipolletti, que traen soluciones de un gran impacto positivo para la sociedad y el ambiente”.
Seis de esos planes están bajo el denominador común de “vuelco cero”, que son los se construyen en Viedma, Las Grutas, Luis Beltrán, Pilcaniyeu, Mainqué y Playas Doradas. También se encuentran las plantas de Cinco Saltos, Río Colorado y Villa Regina.
"Nuestro principal desafío es utilizar el recurso provisto por la naturaleza sin hipotecar su futuro y estar preparados cuando las situaciones se vuelvan complejas, ya sea por el natural aumento de la población o por la aparición de nuevas actividades" subrayó Curetti.
Asimismo, añadió que “desde el organismo trabajamos en garantizar los servicios y hacerlos accesibles a todos, preservando los recursos hídricos para las generaciones venideras y logrando que todos tengan acceso al agua y al saneamiento“.